Shakira confiesa por qué no le gusta escuchar su música antigua: “Era muy exagerada”

El fin de la relación entre Shakira y Gerard Piqué marcó un antes y un después tanto en la vida profesional como personal de la artista colombiana. Tras más de una década viviendo en Barcelona con su expareja y sus dos hijos, la intérprete de Te felicito y Puntería regresaba a Miami para poder desarrollar de nuevo su trayectoria profesional, paralizada durante sus años en España. Este factor, sumado del apoyo que supuso componer música para superar su ruptura, ha provocado la salida a la luz de su nuevo álbum, Las mujeres ya no lloran. La de Barranquilla se encuentra promocionando este trabajo, y recientemente ha asistido al programa Hot Ones, en el q
ue se ha sincerado sobre su trayectoria.

La artista fue entrevistada por Sean Evans, quien la acogió en su espacio dos semanas después de que la artista mundial lanzase su nuevo álbum, que debutó en el puesto 1 en la lista Top Latin Albums. Entre uno de los temas que trató en el programa, y que más curiosidad han causado entre el público, fue cuando reveló que no le gusta escuchar sus canciones más antiguas.

Hace unas semanas ya lo confesó al DJ Zane Lowe, asegurando que si alguno de sus temas antiguos sonaba en la radio le parecía muy desagradable y le decía a sus hijos que “en esa época apestaba”. “Creo que solía exagerar los gritos en mi voz”, revelaba en su última entrevista con Evans, antes de replicar su antiguo estilo. “Lo de lo de lo de’, es demasiado. Creo que fui exagerada. Demasiado, Shakira”, sentenciaba.

“Me di cuenta de que después de mis embarazos, mi voz se volvió más gruesa, más redonda, más llena”, añadió durante su charla con el presentador. “Mis decisiones son más maduras. He evolucionado como mujer, como persona. Mi intelecto ha evolucionado”, terminaba diciendo.

La artista también se sinceró sobre cuál es el error durante una gira del que realmente se arrepiente. Fue durante el Tour de la Mangosta, realizado en 2003, donde compró una figura enorme de una cobra que ponía en mitad del escenario y “le costó un millón de dólares”. “Había sido uno de mis tours más exitosos porque viajé por todo el mundo con soldout en todas partes, pero terminé debiendo dinero por esa estúpida cobra”, sentenciaba.

Desde su primer proyecto musical, que vio la luz en 1991, la colombiana ha logrado mostrar al mundo su versatilidad en distintos estilos musicales, como el poprock, el reggaetón o las baladas. A principios de los 2000 se convirtió en una auténtica estrella mundial. Su último álbum de estudio indaga en su faceta más emotiva y personal, en la que muestra sus sentimientos y se sincera tras uno de los momentos más duros de su vida: su separación del padre de sus dos hijos, Sasha y Milan.